Por Cristina Cabrera
Hace un año que el Covid-19 irrumpió en nuestras vidas dejando una situación nefasta no solo a nivel sanitario o personal, sino a nivel económico. Las restricciones para frenar los contagios se han llevado por delante muchos negocios y los que han sobrevivido lo están haciendo a duras penas. Sin embargo, un año después, la situación no ha mejorado mucho. Continúan los ERTES, las restricciones, negocios cerrados o que son obligados a cerrar, la sensación de miedo que continúa viviendo con nosotros y la gran incertidumbre que nos obliga a preguntarnos: ¿qué pasará?
Ante esta situación, hemos hablado con Héctor, Rubén y Magdalena pertenecientes a tres sectores muy afectados por esta crisis: comercio, turismo y hostelería, respectivamente, para que nos cuenten cómo ha afectado y sigue afectando la pandemia a su negocio y sector. Tres personas, cada una con su experiencia, que representan a muchos compañeros y compañeras que sufren, al igual que ellos, las consecuencias de las medidas impuestas para frenar la pandemia.
MAGDALENA SÁNCHEZ – «La Madrileña»
Magdalena Sánchez lleva 4 años trabajando en hostelería. Es la dueña de La Madrileña, Portman y Hogaño.
La hostelería ha sido otro de los sectores que más perjudicado ha estado durante esta pandemia, con los cierres forzados, los aforos en los establecimientos o la limitación de horario con el toque de queda. “La pandemia me está afectando mucho porque ahora estamos facturando menos de la mitad”, afirma Magdalena, ya que entre las razones se encuentra el cierre de los establecimientos hasta las 9 de la noche, incluso los fines de semana. Por ello, el sector hostelero ha optado por recurrir a los pedidos a domicilio, pero “la gente tiene miedo por la situación y se aíslan un poco” o hay familias que debido a la economía “no puede permitirse pedir a domicilio”, por lo que les ha permitido sobrevivir.
La hostelería continúa sufriendo las consecuencias del Covid-19, muchos han cerrado, pero los que han logrado sobrevivir se encuentran “en una agonía total y hasta el cuello de deudas”. Las Administraciones han repartido ayudas a la hostelería, sin embargo, “las ayudas son mínimas”, ya que según comenta Magdalena, lo que necesitan son “ayudas directas para poder seguir adelante”.
Muchas veces las ayudas no llegan a todos, “al final te piden unos requisitos que, si no los cumples, no tienes derecho a nada”, lo que agrava más la situación a todos aquellos que no pueden recibir ningún tipo de ayuda. Para Magdalena, la solución es dar “ayudas directas, reducir los impuestos y ampliar las terrazas”, especialmente de cara al buen tiempo y, sobre todo, “que la gente se conciencie y tome precauciones para que todos podamos trabajar y salir adelante”.
HÉCTOR VALDIVIELSO – «Non Sit Peccatum»
Héctor es el propietario de Non Sit Peccatum, Parafarmacia y Salud Sexual y presidente de Comercyas, una asociación que nació durante la pandemia de la necesidad para ayudar al pequeño comercio de Talavera.
El sector del comercio se ha visto afectado por la pandemia y las restricciones. Su negocio, como muchos otros en Talavera viven de los clientes de la comarca, pero ahora “tienes más de un 50% de clientes que no pueden venir, más la reducción de consumo de todos los clientes que tienes, mucha gente no está cobrando los ERTES o tienen una reducción salarial importante”, es decir, la economía de los clientes no les permite gastar en productos que no sean bienes básicos.
La situación se agrava con problemas como la caducidad de los productos. Muchos se ponen en oferta y “aunque no haya beneficio, por lo menos no hay pérdida”, comenta Valdivielso. Sin embargo, durante la pandemia al no dar salida a estos productos, muchos se han terminado tirando, generando pérdidas y hay que sumarle la dificultad para conseguir productos o los retrasos en las entregas. El futuro no se ve muy prometedor. “El sector del comercio ahora está mal y dentro de cinco años espero que siga existiendo porque está desapareciendo”, declara Héctor ante la situación que vive el comercio en la ciudad. “No hay relevo generacional” porque los jóvenes compran a través de Internet. La red se ha convertido en otro competidor del comercio, sobre todo, las grandes plataformas, un tipo de “competencias desleales que están acabando con el comercio”.
“No necesitamos ayudas, necesitamos que nos dejen trabajar” porque las ayudas no llegan a “mucha de la gente que sí debería de llegar. También hay que tener en cuenta la gente que ya no está, que ha tenido que cerrar sus negocios”, comenta Héctor, añadiendo que “estos fondos no se han utilizado desde el primer día de una forma efectiva. Si la gestión fuese buena, esa gente no habría cerrado”.
Para Valdivielso, una solución es que los políticos “dejen de pensar en medidas a corto plazo” para pensar en proyectos “a largo plazo con una inversión mucho más grande y un acuerdo común entre todos los sectores”.
RUBÉN MARTÍN – «La Barbacana»
Rubén es promotor turístico y agente de viajes en Talavera de la Reina y presidente de la Asociación Turística La Barbacana. Hace 8 años comenzó su andadura en el sector, “ofreciendo actividades y visitas en mi ciudad para después ir ampliando la oferta a la Comarca de Talavera”, nos comenta.
La pandemia se ha cebado con el turismo. Rubén nos cuenta que después de un verano donde realizaron múltiples actividades como rutas, viajes o visitas guiadas, se vieron “envueltos en un parón obligado”. No fue solo “por las restricciones impuestas por la Administración”, sino porque para ellos “prima la salud y nunca pondremos en riesgo a nadie”, afirma.
La situación de este sector “es nula por las restricciones de movilidad”. Existe un miedo a realizar viajes en grupo y aunque “mientras exista la restricción de reunión de 6 personas” es complicado realizar visitas guiadas, han optado “parar hasta que la situación mejore”.
El ERTE ha sido la ayuda que han recibido para afrontar estas circunstancias. Recientemente, en Talavera se ha aprobado un Fondo de Rescate para los sectores más afectados, “toda ayuda es buena, pero soy más de mirar al futuro”, comenta Rubén, “ahí es donde necesitamos ayuda, es necesario aunar esfuerzos entre todos los agentes para revertir esta situación”.
«Talavera es la tercera ciudad de Castilla-La Mancha con más Bienes de Interés Cultural”. La ciudad está preparada, “hay grandes profesionales y lugares muy interesantes para visitar tanto en nuestra ciudad como en el entorno más cercano”. Aunque habría que mejorar el turismo, “tenemos que dar más opciones al visitante”. “Muchos profesionales empiezan, pero pocos perduran en el tiempo”, de ahí que la virtud de Rubén sea “ser constante y luchar en muchos frentes para poder vivir de esta pasión”.
Internet “es el futuro y debemos adaptarnos”, aunque todavía hay personas que prefieren no buscar y tener todo su viaje preparado para encargarse solo de disfrutar. “La única solución es la vacuna” opina Rubén porque una vez que seamos inmunes “nos encargaremos de dar opciones para que la población disfrute de nuestro país y aquellos países que estén en la misma situación”.
