Poner en marcha una maquina obsoleta y parada durante años es muy complicado. Esa ha sido la ingente labor del actual gobierno municipal, poner en marcha de nuevo a Talavera.
Ya empiezan a ser muy visibles los efectos del impulso dado a la ciudad. La variante sur, después de años parada, ya es una realidad. El trazado es visible y en un año la tendremos en pleno uso.
El cambio de paradigma de la ciudad, apostando por las nuevas tecnologías como factor económico de futuro, ya es un hecho imparable y son cada día más las empresas de este sector las que se interesan por implantarse en Talavera.
El ministerio de Hacienda ha dado luz verde al préstamo para poder pagar a los cientos de talaveranos afectados por el pufo de los planes de empleo mal gestionados por el anterior gobierno del PP.
Se presentan unos presupuestos ambiciosos que generarán empleo y riqueza aprovechando el impulso que se está dando desde la administración regional y nacional con los fondos europeos.
Se desatasca de forma efectiva el problema del desdoblamiento de la N-V para dotar a la ciudad de una entrada digna, amplia y eficiente. Ya queda menos para que pase al olvido el atasco continuo de la entrada y salida de Talavera.
Las actuaciones en el patrimonio no pueden ser más espectaculares: puesta en valor de las murallas, del río con la antigua hidroeléctrica como símbolo emergente, de los jardines del Prado con una acción global y duradera, revitalización del casco antiguo y una apuesta seria y decidida por nuestra riqueza histórica y natural.
Y todo esto sin olvidar un solo aspecto de la ciudad y de los talaveranos. Desde la solidaridad, desde el compromiso con los barrios, con el turismo, con el deporte y con la cultura. En definitiva, Talavera está en marcha y nada hay que agradecer a los vocingleros que abundan dentro y fuera del pleno municipal.
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