En el diseño de interiores de baños, encontrar soluciones para hacer buen uso del espacio disponible es fundamental. En ese contexto aparecen las hornacinas para baños, elementos versátiles y prácticos que permiten aprovechar las paredes y crear espacios de almacenamiento adicionales.
Estas estructuras empotradas ofrecen una solución elegante y funcional para organizar productos de cuidado personal, almacenar artículos esenciales y agregar un toque de estilo al baño.
¿Qué son las hornacinas para baños?
Las hornacinas para baño son elementos arquitectónicos empotrados en las paredes que proporcionan espacios de almacenamiento integrados. Estas estructuras se crean durante la fase de construcción o renovación del baño y se les diseña con el fin de ser funcionales y estéticamente agradables.
Pueden ser rectangulares, cuadradas o incluso tener formas más orgánicas, y suelen estar revestidas con materiales resistentes al agua, como baldosas o piedra, para poder así garantizar su durabilidad.
Tipos de hornacinas para baños
Hay distintos tipos de hornacinas, pero todos ofrecen ventajas prácticas y estéticas, al permitir mejorar la organización y el diseño del baño
Hornacinas con luz: Están equipadas con iluminación incorporada, lo que hace de ellas una opción ideal para exhibir productos de belleza y cuidado personal. La iluminación en el interior resalta los objetos expuestos y crea un ambiente agradable y relajante en el baño.
Hornacinas LED: Tienen bandas de luces LED en su estructura, lo que les hace modernas. Las luces pueden tener diferentes colores y ser regulables, permitiendo ajustar la iluminación según las preferencias personales.
Hornacinas de obra: Se integran completamente en la pared. Son personalizables en términos de tamaño y forma, lo que permite adaptarlas perfectamente a las necesidades del espacio y al estilo de diseño del baño.
Ventajas de las hornacinas para baños
Veamos ahora cuáles son las ventajas de instalar este elemento:
Optimización del espacio: Permiten darles un uso eficiente a las paredes, optimizando el espacio disponible en el baño. Al empotrar estas estructuras, se evita ocupar espacio en el suelo, proporcionando una sensación de amplitud y orden en el baño.
Almacenamiento adicional: Ofrecen una solución de almacenamiento práctica para artículos de cuidado personal, como champús, jabones y cosméticos. Al tener estos productos al alcance de la mano, se evita el desorden en los estantes o en el lavabo.
Estética y personalización: Las hornacinas agregan un toque de elegancia al espacio. Se adaptan a cualquier estilo de baño, sin importar si es moderno, rústico o minimalista. Además, se pueden personalizar con diferentes materiales y acabados para complementar la decoración existente.
¿Dónde ubicar la hornacina?
La ubicación de la hornacina dependerá del diseño y la distribución del baño, así como de las necesidades individuales. Estas son algunas recomendaciones a tomar en cuenta:
En la ducha: Colocar una hornacina en la zona de la ducha es una opción popular. En ella se pueden almacenar productos de higiene personal y mantenerlos al alcance mientras se está en la ducha.
Junto al lavabo: Esta ubicación resulta conveniente para guardar elementos esenciales, como productos de cuidado facial y cepillos de dientes.
En la pared opuesta al inodoro: Resulta útil para almacenar papel higiénico, toallas de mano y otros artículos necesarios en el baño.
En la zona de la bañera: Si el baño tiene una bañera, poner una hornacina en la pared cercana brindará un espacio adicional donde colocar velas, sales de baño o productos relajantes.
En la pared cerca del espejo: Es buena idea para tener a mano productos de cuidado facial, maquillaje y otros elementos necesarios para el arreglo personal.
Sin importar en qué parte del baño deseas construirla, es importante considerar aspectos como la altura y el tamaño de la hornacina para garantizar que no interfieran con el flujo del espacio.
