Para Libertad Montero, Alberto, ser artista es actualmente su profesión, pero todo surgió por casualidad. “Fui el candidato a alcalde más joven de España en las elecciones de 2011. Luego me convertí en concejal, y me tocó gobernar con María Dolores de Cospedal de presidenta. Que yo siempre digo en los shows que le llamábamos la ‘neutrex’. Porque vino del futuro para acabar con la Mancha” nos cuenta, y añade que “estuve cuatro años de concejal. Fui, hasta lo que yo tengo entendido, uno de los primeros concejales de igualdad de nuestra región”. Durante su cargo como concejal hizo bastante activismo efectivo. Ya había estado trabajando en el activismo y había estado en las comunidades socialistas desde los 16 años, acompañado siempre de una conciencia muy progresista.
“Es cierto que aquello alteró un poco mi vida. Porque goberné con la derecha, con el Partido Popular y bueno, aquello no acabó del todo bien. Los poderosos y los grandes nunca quieren que se cambien las cosas”, “En 2011 todavía estaba en pañales aquello, pasaron muchas cosas y acabé una tarde ya no siendo concejal de Gobierno”.
Aunque para Alberto, fue muy importante todos los hitos que consiguieron con mucho esfuerzo. Pero la realidad y 10 – 11 años después admira los frutos como la ley de derechos LGTBI o la primera consejería de igualdad que hay en el gobierno regional.
Del mundo político al mundo de la noche y el show
Tras finalizar su trabajo como concejal. Mientras daba un paseo con el que era su novio de entonces por el barrio madrileño de Chueca, Libertad iba buscando trabajo. “Encontré un cartel que ponía que necesitaban relaciones públicas en un bar muy conocido, llamado Misa de 12. Y aunque yo no había hecho esta labor en mi vida, entré y me encontré con una mujer. Ella es a día de hoy una de mis mejores amigas. Una lesbiana poderosa que me dijo: pero, ¿tú te has dedicado alguna vez a esto? A lo que la contesté que: Si he logrado que me voten siendo el maricón del pueblo. ¿Cómo no voy a conseguir que la gente se tome una caña en Chueca?”. Gracias a esta soltura consiguió el trabajo.
No todo fue fácil. Pues para Libertad le supuso adquirir habilidades a través del humor para conseguir que la gente entrar en el bar y así poder ganarse el sueldo a través de comisiones. “Hacía mucho el ‘monguer’ para conseguir que entraran. Y tanto gustó que mis jefes me propusieron hacer un monólogo un día a la semana y que, ya que estaba en Chueca lo hiciera vestido de Drag Queen”.
Así surgió Libertad Montero, una Drag Queen de pelo en pecho. “Me daban 10 minutos para maquillarme y prepárame, entonces con tan poco tiempo no podía afeitarme, etc. Así que decidí dejarme la barba cuando entonces era casi impensable una Drag con barba y menos en el Madrid castizo. Con barba y pelo en el pecho era impensable. Pero bueno, yo lo hice y tuve bastante aceptación. Hasta el punto de que una compañera que es muy conocida, sobre todo en el ambiente LGTBI, Kika Lorace, tenía un concurso y me llamó por si me quería apuntar. De esto hace ya 8 años y quedé tercero”.
Gracias a su participación, una de las salas más importantes de Chueca, Delirio, que lleva más de 20 años en Chueca, le ofreció trabajar dos días a la semana. Más tarde surgieron más propuestas, por lo que Libertad terminó dejando las RRPP para dedicarse al show.
“Empezaron a llamarme de otras salas, de otras fiestas y decidí profesionalizar lo que se había convertido en mi profesión. Entonces empecé a hacer cursos de improvisación, de comedia y de canto. Así creo que fue como comencé y cómo surgió”.
Libertad ha contado con innumerables apoyos y mentores como el cómico catalán Albert Boira. Sobre todo el apoyo de los dueños y dueñas de las diferentes discotecas y salas. Pero si tenemos que destacar a alguien es a Isabel Montero, la abuela de Libertad. Porque además de criar y acompañar su nieto en toda su vida, ha participado con él encima del escenario con gran protagonismo.
¿Su proceso?
Como bien nos cuenta, ha estado lleno de altibajos. “Ha sido un proceso largo y complicado de 8 años subido a un escenario. Con momentos increíbles como compartir escenario con Rosa López en la mítica Joy Eslava. También trabajar en el Teatro Cervantes de Alcalá o el Teatro Arlequín de la Gran Vía. ¿Sabes lo increíble que es ver tu cara en la Gran Vía?”. “También recuerdo con especial cariño cuando canté delante de 35000 personas en la gala de Mister Gay en la Puerta del Sol. Simplemente impresionante”.
Y en los altibajos, también hay muchos momentos bajos como nos asegura Libertad. Él mismo hace una conocida autorreflexión, y es que ser artista es muy complicado laboralmente hablando, porque no tiene asegurado el trabajo. “La inmensa mayoría de mis compañeros y compañeras en cualquier ámbito artístico por desgracia se tienen que dedicar a otra cosa. A un trabajo más normativo. La mayoría al final acaban en hostelería y es una profesión muy complicada. Más cuando en este país, en nuestra región, hay muchísimo talento y es muy difícil, particularmente las Drag Queen, Travestis, Transformistas, Queers,… Lo tenemos todavía más complicado, ya que hasta hace muy poquito, incluso ahora, en muchos sitios no se nos valora.
Muchos promotores o Fiestas quieren a una “mamaracha” con peluca y les da exactamente igual lo que haga, solamente quieren que esté ahí. A lo mejor le dan 40 o 50 euros y 3 copas por salir en el cartel sin tener ni idea. A mí me llegó a pasar de ir a dar un concierto a Barcelona. Cuando llego allí, el promotor, me recoge en hotel y me dice que qué hago, que qué necesito para actuar. Y digo bueno, pues un micrófono y un técnico de sonido y luces que me lance la música. A lo que me dice, ¡Ah!, pero ¿tú cantas? Y solo esto de camino el bolo. Esto me ha pasado en más sitios”.
Actualmente, el mercado laboral está aún peor. Pues tras el programa dedicado a las Drag Queen, el mercado ha subido, pero los locales son los mismos, haciendo que las personas como Libertad, que llevan 12 años en esto, se vean sin reconocimiento. Esto junto con 1000 factores más hacen que Libertad actualmente y de manera real le planteé una situación imposible con la que vivir y mantenerse.
Pero nada más lejos de la realidad, Libertad no se plantea volver a casa, a Talavera. “Talavera tiene un panorama artístico reducido de locales donde trabajar como yo lo hago. Y por desgracia, aunque muy agradecido, solamente han contado conmigo en iniciativas privadas. Quizás eso deba cambiar y el Ayuntamiento dar más apoyo a artistas locales que se han ido fuera, sin necesidad de ser nacionalmente conocidos. Tengo una espina clavada en ese sentido, y me gustaría que contaran conmigo desde Cultura o Festejos”.
Libertad Montero, artista
Si deseas conocer a Libertad lo mejor es ir a verle por Chueca en Delirio o Black & White, sus shows son únicos y merecen la pena. Repetirás.
Siempre puedes seguirle en sus redes sociales o conocer su último EP, dedicado a la memoria de su abuela, con las canciones que Libertad le cantaba en la intimidad.
