Desde tiempos inmemoriales la vuelta al cole ha sido un auténtico dolor de cabeza por el gran desembolso que supone.
Hace unos días hablábamos con un padre que nos decía que no entiende como en su casa se han gastado casi 700€ en los libros de texto de sus dos hijos de este año para primaria y secundaria. Y si, es cierto, esas cantidades para un hogar en Talavera supone un desbarajuste de presupuesto mensual, y si nos apuras hasta anual, tal y como están las cosas.
Por este motivo los padres se han visto obligados a hacer uso de la segunda mano, las promociones, el prorrateo de las compras, eliminación de extraescolares, matinales y comedores, etc… desde unos años, y este año aún más.
Ya no solo es la vuelta al cole, sino el día a día, pues el desplazamiento al colegio, teniendo en cuenta la subida de los precios del gasoil es un incremento a tener en cuenta para los bolsillos. Parecía que era ayer cuando veíamos bajar los precios del gasoil hace tan solo dos semanas, pero septiembre llega y volvemos a ver gasolineras con el gasoil “barato” por encima de ¡¡los 2€!! Y es que no es disparatada la idea de movilizar a nuestros hijos a otro centro, pues investigando en los diferentes blogs, vemos a algunos padres, motivados por la situación, al cambio de centro de sus hijos. Incluso pasar de colegios privados a públicos por no poder asumir sus costes.
Siguiendo con nuestra radiografía a la vuelta al cole 2022 debemos recordar que la ley de educación vuelve a cambiar, lo que supone que los libros de los cursos impares son, si o si, nuevos.
Esto afecta a las familias si buscan de segunda mano. La subida por libro es de aproximadamente entre un 8 y un 10%, pero la nueva ley trae unificación de materias. Hablemos en plata, el precio de los libros ha subido, si, pero ahora son menos materias, por ende, menos libros, por lo que el desembolso económico es prácticamente igual a otros años. Dejemos el material y los uniformes aparte, pues aquí sí que vamos a notar la subida de precios.
Los empresarios del sector, están motivados por la temporada y viven con la esperanza de al menos no perder esta temporada, pues como bien es sabido los libros de texto de infantil y bachillerato tienen un precio marcado que ellos no pueden variar, pero los de primaria y secundaria es variable. ¿Qué quiere decir esto? Muy sencillo, en los precios variables ellos añaden su porcentaje de beneficio al precio de compra. Para ellos es un auténtico dolor de cabeza pues ellos se ven con sus gastos incrementados, pero se sienten en la obligación de no subir mucho para poder fidelizar sus clientes.
NO TODO ES MALO
No todo es malo, pues podemos encontrar diferentes tipos de ayudas y becas. Las principales con las brindadas por la Junta de Castilla-La Mancha y el Ayuntamiento de Talavera. La Junta por su parte cubre casi el 100% de los libros de texto a casi el 30% del alumnado. Por su parte el Ayuntamiento da un cheque de 75€ para ayuda de libros.
En resumen, el panorama es difícil, muy difícil para algunas familias, pues a esto añádele el encarecimiento de la bolsa de la compra, las hipotecas, luz, impuestos, etc… Pero para tener una consciencia plena sobre esto hemos querido contar con las diferentes opiniones y testimonios de empresarios talaveranos del sector.
LOS LIBREROS HABLAN
Víctor de Salvalibros: «Nosotros nos dedicamos principalmente a la venta de libros de segunda mano. Sobre todo libros de secundaria y bachillerato, y por el momento no hemos trasladado una subida de precios a nuestros productos. La inflación nos la hemos comido nosotros. Por el momento no podemos anticipar nada, será en septiembre cuando veremos si nos va a afectar o no todo esto como empresarios».
Nazario de Librería Páginas: «Las previsiones son como todos los años: esperar los pedidos. Nuestra defensa como pequeño comercio es la atención personalizada y profesionalizada, dando una repuesta a todas las demandas del cliente. Cada año vendemos más, lo que significa que es uno de los elementos más importante. La inflación es un cuento chino, tradicionalmente los libros de texto, de manera sistemática, han subido anualmente por parte de las editoriales entre un 3-5%. Igual que este año. Esta situación nos afecta directamente por la competencia a través de grandes superficies y los colegios privados que venden libros. Ellos cuentan con una ventaja, las librerías vendemos lo que nos solicita el colegio. En los colegios son los que eligen los libros que van a usar, y no suelen ver, y no en todos los casos, el nivel pedagógico, sino el descuento de la editorial por los libros.
En líneas generales yo diría que lo que ha subido es alrededor de un 5% y en papelería algo más. Pero menos de lo que nos decían. El alarmismo ha sido tal, que se implantó de manera injustificada. Ha subido todo, pero no tanto como se nos quiere mostrar, y no es apenas significativo. La vuelta al cole es prácticamente igual. Para nosotros está siendo un curso normal, como cada año».
Ángel de Librería El Faro: “De momento se han subido los precios, pero a nivel general como cualquier artículo. En pedidos, no he notado perdidas de pedidos, pero si hay más gente que pide presupuestos. Las grandes superficies online nos dan una competencia que no podemos asumir, por su gran margen de maniobra. Este año hay que andar con el cinturón apretado y aplicar descuentos a nuestros márgenes, para intentar fidelizar al cliente”.
Fernando de Librería Loave: “Creemos que prácticamente ha subido un 30% todo, tanto libros de texto como material escolar. La cuesta de septiembre va a ser muy empinada, como un puerto de montaña. Desconocemos cual es la previsión con respecto a otros años. Avanzamos algunos productos, y hay gente que habitualmente antes de septiembre empieza a comprar materiales, de manera anticipativa. Lo que si prevemos es que la gente va a reciclar, porque notamos una bajada en cuanto a pedidos de texto nuevo. La gente recurre a la segunda mano. Alumnos del mismo colegio venden los libros de cursos anteriores y los padres hacen uso de esto. Aunque este año no se puede aplicar a los cursos impares.
Las becas toman un papel importante para esto último. El papel ha subido entre un 20-30%, y se espera que suba más. Teniendo en cuenta esto, más la subida en todo: transporte, manipulación, etc.. resulta que el más perjudicado siempre es el cliente final. En cuanto a precios libres de primaria y secundaria, el margen le ponemos nosotros y siempre perdemos. Las grandes superficies nos hacen mucha competencia. También debemos incluir el AMPA y los colegios privados que venden libros».
