Un caso confirmado de sarna en el Centro de Mayores ‘Casablanca’ de Talavera de la Reina, Toledo, ha llevado a la Consejería de Sanidad a implementar de inmediato los protocolos necesarios para abordar esta situación. Además, se están investigando cuatro casos adicionales con sospecha de la enfermedad. Cabe destacar que los brotes se consideran oficiales una vez que se confirman tres casos.
La sarna, o escabiosis, es una enfermedad infecto-contagiosa que se transmite fácilmente a través del contacto cercano y la exposición a ropa y textiles contaminados. El Departamento de Salud Pública ya ha comenzado a llevar a cabo las medidas recomendadas, especialmente en lo que respecta a tareas de desinfección.
La dirección del centro de mayores ha contactado con los familiares de los residentes para informarles sobre la detección de un brote de escabiosis en la residencia. Esta enfermedad, causada por ácaros que crean pequeños surcos en la piel y provocan picor intenso, afecta a personas de todas las edades.
Aunque no es considerada una enfermedad grave, su incidencia ha aumentado después de la pandemia de COVID-19, afectando a diversas poblaciones. El tratamiento incluye medidas de higiene personal, lavado de ropa a altas temperaturas y terapia farmacológica que involucra cremas, pomadas y comprimidos por vía oral.
Los residentes infectados recibirán ambos tratamientos, y se informará detalladamente a las familias de los pacientes afectados. Se administrará el tratamiento a todos los residentes en el mismo día para garantizar su efectividad y prevenir reinfecciones.
Se insta a los familiares que presenten síntomas o lesiones a evitar el contacto cercano con sus seres queridos y a informar a los profesionales del centro. La coordinación de la intervención involucra a profesionales de la salud del centro, la Unidad de Apoyo a Residencias y el Departamento de Epidemiología del Sescam.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la sarna humana es una infestación parasitaria causada por ácaros diminutos que se entierran en la piel, donde ponen huevos, desencadenando picor intenso y erupciones cutáneas. Puede causar úlceras en la piel y complicaciones graves, como septicemia, afectando al corazón y los riñones. Se trata con cremas o medicamentos que se ingieren. La sarna se propaga por contacto directo con la piel de personas infectadas.