El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha está a punto de dar luz verde a un significativo convenio suscrito con el Ministerio de Derechos Sociales, cuyo valor asciende a la notable suma de 104 millones de euros. Esta inversión tiene como objetivo principal el fortalecimiento de las infraestructuras y servicios relacionados con la atención a la dependencia en la región. Este acuerdo representa un incremento sustancial con respecto al convenio del año anterior, con un aumento de 40 millones de euros.
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha destacado que el Gobierno regional ya ha comprometido fondos para adelantar esta inversión esencial. Subraya la importancia de destinar recursos a la atención a la dependencia en una comunidad autónoma en la que más de 400,000 personas superan los 65 años. No obstante, García-Page enfatiza que el envejecimiento de la población no se debe considerar como un problema, sino como un indicador de éxito.
Los 104 millones de euros que la región recibirá como resultado de este convenio representan un valioso aporte que permitirá validar un incremento de 40 millones de euros, en línea con las directrices del Ministerio de Derechos Sociales. Estos recursos serán fundamentales para avanzar en la mejora de las condiciones de atención a la dependencia, beneficiando tanto a la población de la tercera edad como a otros segmentos de la sociedad que requieren asistencia y cuidados especializados.
Emiliano García-Page se enorgullece de que Castilla-La Mancha sea una de las regiones con mayor esperanza de vida, siendo sus residencias un hogar para personas de la cuarta edad, es decir, aquellos que superan los 80 años. Esto refleja el compromiso de la región con el bienestar y la calidad de vida de sus ciudadanos mayores, así como su dedicación a proporcionar atención y apoyo adecuados a quienes lo necesitan.
