La concejala de Protección Social y Reducción de la Desigualdad, Nuria Sánchez, ha compartido con ALCER-Toledo el buen servicio para los pacientes de la Unidad de Hemodiálisis desde su puesta en marcha en el Hospital General Nuestra Señora del Prado el pasado mes de noviembre. En este sentido, ha recordado que gracias a esto se ha conseguido que más de 120 pacientes de enfermedad renal no tengan que trasladarse a Toledo en caso de requerir de un ingreso hospitalario.
En la misma línea se ha manifestado el vicepresidente de la asociación, José Antonio Herranz, quien ha valorado que en caso de que un enfermo renal tenga una operación programada no tendrá que desplazarse, sino que podrá ser hospitalizado en la ciudad, lo que supone también evitar ese trastorno para sus familiares y acompañantes. Por eso, el responsable del colectivo ha considerado que es una “ventaja grandísima” que ha agradecido al Gobierno municipal y al regional, porque “se han molestado y esforzado para que esto funcione”. Herranz también ha expuesto que se han experimentado otros importantes avances en el centro hospitalario, como el aumento de 2 a 5 nefrólogos.