La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha denunciado nuevamente los riesgos para la salud y seguridad que sufren los trabajadores de la oficina de Correos situada en la Plaza del Reloj de Talavera de la Reina. La fachada del edificio presenta importantes grietas que han obligado a la Policía Local a acordonar la zona para evitar el paso de peatones.
El sindicato recuerda que ya en diciembre de 2023 presentó una denuncia ante Inspección de Trabajo, lo que llevó a un requerimiento en abril de 2024 para subsanar las deficiencias, calificadas como “infracciones graves”. Sin embargo, más de un año después, la situación sigue sin resolverse, lo que llevó a CSIF a presentar una nueva denuncia el pasado mes de febrero ante la falta de acción por parte de Correos.
Riesgo de derrumbe y peligro para trabajadores y viandantes
El problema principal radica en la fachada de la oficina, ubicada en la calle Corredera del Cristo, donde las grietas horizontales afectan tanto a la estructura del edificio como a la carpintería metálica que sostiene grandes ventanales. Según advierte CSIF, el deterioro podría provocar la rotura de los cristales, con el consiguiente riesgo de caída sobre empleados, clientes y transeúntes.
Ante esta situación, la Policía Local ha precintado el perímetro para evitar posibles accidentes. Sin embargo, los trabajadores de la oficina continúan desempeñando su labor dentro del edificio, expuestos a un peligro evidente.
Denuncias reiteradas y falta de respuesta de Correos
El presidente de CSIF Toledo, Raúl Turín, ha lamentado la pasividad de Correos ante una situación que califican de “insostenible”. “A pesar de las denuncias que hemos presentado y de los requerimientos de Inspección de Trabajo, la inseguridad persiste. La desidia de Correos es enorme, no se puede jugar con la salud y la seguridad de los trabajadores”, ha declarado.
Además, la Central Sindical ha denunciado otro problema de seguridad en la Unidad de Reparto de Correos en Talavera, situada en Ronda del Cañillo. En este caso, la ausencia de una rampa adecuada de carga y descarga obliga a los trabajadores a invadir la calzada, con el consiguiente peligro tanto para ellos como para los conductores.
Desde CSIF exigen una solución inmediata y advierten que continuarán denunciando la situación hasta que Correos garantice unas condiciones de trabajo seguras para sus empleados.
