El viaje en tren de media distancia que conecta Madrid con Extremadura, y pasa por Talavera, se ha convertido en un verdadero caos, después de que un incendio se haya originado en los bajos del convoy, apenas media hora después de iniciar la travesía. Los pasajeros han sido alertados por un fuerte olor a quemado que ha invadido el interior del tren, lo que ha obligado a detenerlo en Leganés. La situación ha sido de tal magnitud que, en pocos minutos, la estación se ha visto completamente cubierta de humo.
Los operarios de la estación, conscientes de la gravedad de la situación, han tratado de sofocar las llamas con los extintores disponibles, mientras se esperaba la llegada de los bomberos. Por fortuna, y aunque el incidente ha sido de gran magnitud, no ha habido que lamentar víctimas personales.
Sin embargo, las reacciones no se han hecho esperar, especialmente de aquellos que se encuentran en plena campaña electoral. La candidata del Partido Popular a la presidencia de la Junta de Extremadura, María Guardiola, ha denunciado el suceso, calificándolo como «el tren de la vergüenza». Asimismo, ha exigido responsabilidades «al más alto nivel», asegurando que «los extremeños no somos españoles de segunda», y demandando justicia para todos los afectados.
