Es repetitivo decir que, si los tesoros que tenemos en Talavera, estuvieran en Toledo, gracias a la orgía de millones que recibe esta ciudad continuamente habría hecho que ya estuvieran sacados a la luz hace años. Sin embargo, la hermana pobre y pedigüeña mantiene sus restos arqueológicos más importantes en el abandono desde hace años.
Esta semana el Pleno aprobaba por unanimidad a la Junta que reinicie las excavaciones y estudios de la villa de Saucedo. Este monumento de nuestro pasado más remoto se encuentra parado desde hace lustros y ha sufrido el espolio de multitud de desarmados que han robado restos arqueológicos que dan idea de la importancia de nuestra ciudad en las etapas romana y visigoda. Estoy convencido de que cuando esta petición del pleno llegue a la Junta, la tirarán a la papelera como todo lo que suponga un mayor esplendor para Talavera y sus tierras.
Por otro lado, tenemos tal vez uno de los restos más importantes de arte califal europeo. La Alcazaba de Talavera, conocida popularmente como huerto de San Agustín. Solo las toneladas de tierra que sobre sus restos descansan saben los tesoros que podríamos encontrar. Tal vez no haya oro ni piedras preciosas, pero si valiosos restos que desde el siglo X darían fiel ejemplo del pasado de Talavera y del califato de Córdoba al que Talavera fue siempre fiel durante la época islámica.
Pensándolo bien, tal vez sea mejor que sigan tapados mientras exista Castilla –La Mancha y no haya un museo propio de historia de las Tierras de Talavera, porque se llevarían todos los restos a Toledo. Lo almacenarían en los sótanos del Santa Cruz como tantos ejemplos de nuestra historia que mantienen guardados. Talavera necesita ya un Museo de historia de las Tierras de Talavera. Talavera necesita ya un director para el Ruiz de Luna, que es otra de las mentiras y promesas incumplidas de Page. Talavera necesita recuperar su historia porque no queremos olvidarla.
