El mural de la calle San Clemente se está cubriendo con carácter preventivo, mientras se decide cuál será la fórmula más viable para reparar, consolidar y mantener este elemento. Además de cuidar y evitar nuevos desprendimientos de azulejos, se podrá seguir apreciando la imagen habitual que muestra este trabajo, como son las Mondas, ha explicado la concejala de Ciudadanía e Imagen Sostenible de Ciudad, Montserrat Muro. De esta forma, se aplica esta opción para “preservarlo” previamente al inicio de las labores de remodelación para “solventar el problema que dicho mural tiene de origen”.
Mientras se está trabajando, se instalará una réplica del dibujo que se llevó a la cerámica, para que tanto los talaveranos como los visitantes mantengan en su retina estos detalles de la fiesta más ancestral de la ciudad, “al mismo tiempo que se contribuye a una mejor imagen de ciudad”, ha añadido.
Tal y como se hace en obras nuevas o de remodelación en edificios o fachadas de muchas ciudades españolas, mientras se procede a los trabajos materiales, se instalan lonas o paneles que muestran la imagen habitual o futura de esa actuación, para que no haya un aspecto discordante en el conjunto de los barrios y se encuentre “sintonía y armonía” en el ámbito urbano, ha apuntado la concejala de Ciudadanía e Imagen Sostenible de Ciudad.
Mientras tanto, el Ayuntamiento, la empresa ejecutora de los trabajos y el ceramista encargado de dar forma a este mural siguen trabajando para “decidirse por actuar en base a la mejor opción, la que más segura resulte para mantener los azulejos que componen el mural y la que suponga una ejecución menos complicada”. Hay que recordar que han sido más de una decena de piezas las que se desprendieron y que habrá que volver colocar, al tiempo que se hacen otras acciones para consolidar este mural en el tiempo con las máximas garantías.