Se proyecta el establecimiento de un segundo aeropuerto para Madrid en Casarrubios, Toledo, con la aspiración de generar 40,000 empleos. La comitiva de empresarios de la Comunidad de Madrid y Toledo, liderada por Miguel Garrido de la Cierva (CEIM) y Javier de Antonio (Fedeto), visitó el aeródromo de Casarrubios para evaluar su potencial como el segundo aeropuerto comercial del centro de España.
Guiados por Javier Ruedas, consejero delegado de Air City Madrid Sur, la empresa propietaria, los empresarios exploraron las instalaciones estratégicamente ubicadas en la frontera entre Toledo y Madrid. Durante la visita, Ruedas destacó que Madrid es única entre las capitales modernas al tener un solo aeropuerto, mientras que otras capitales europeas cuentan con varias opciones.
La ubicación ventajosa de Casarrubios, a 30 kilómetros de Madrid y con acceso a vías de alta ocupación como la autovía A-5, es un punto a favor según Ruedas. El proyecto incluye una pista principal de 3,200 metros y una secundaria de 1,500 metros para vuelos de aviación general o ejecutiva.
Ruedas subrayó el potencial del segundo aeropuerto, estimando que podría contribuir al 2% del PIB de la Comunidad de Madrid y generar 40,000 empleos. Esta valoración también fue respaldada por Castilla-La Mancha, que estimó un impacto entre el 8% y el 10%.
La propuesta se presenta como una colaboración público-privada y destaca la necesidad de evitar depender de un único aeropuerto en Madrid, especialmente ante imprevistos como drones en el espacio aéreo o condiciones climáticas adversas. Ruedas enfatiza la evolución exponencial del sector aéreo y la importancia estratégica y geopolítica de Madrid.
El análisis de la zona para un segundo aeropuerto se remonta a 1978, y según Ruedas, todos los estudios confirman la consolidación aeronáutica de este emplazamiento. Se espera que, una vez aprobado el plan maestro, el aeropuerto esté operativo en cuatro años, con una previsión de 10 millones de pasajeros en la primera década y una oferta de entre 40 y 60 destinos nuevos. Se proyecta la creación de casi 63,000 puestos de trabajo y una inversión de 2,500 millones de euros. La expansión de la flota aeronáutica mundial respalda la sostenibilidad y crecimiento de Barajas y Madrid en el tiempo.
