Con la llegada de diciembre y la proximidad de las festividades navideñas, los casos de infecciones respiratorias muestran un aumento anual en España. Las bajas temperaturas, combinadas con una mayor interacción social habitual desde el Puente de la Constitución, proporcionan un terreno propicio para la proliferación de virus. Este año, el cóctel conformado por la gripe, el COVID-19 y el virus respiratorio sincitial (VRS) ha elevado la preocupación en los centros de salud.
Los médicos de familia especializados en enfermedades infecciosas de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen), señalan que en los últimos 10 a 12 días se ha observado un significativo aumento de todas las infecciones respiratorias en Atención Primaria. Aunque diciembre suele marcar un repunte, este año se destaca por ser más pronunciado que en anteriores ocasiones.
Aunque los datos oficiales pueden tener cierto rezago, las últimas estadísticas del Sistema de Vigilancia de Infección Respiratoria Aguda (Sivira), publicadas semanalmente por el Instituto de Salud Carlos III, confirman esta tendencia al alza.
En la semana número 50, que comprende del 11 al 17 de diciembre, la tasa global de infección respiratoria aguda en Atención Primaria alcanzó una incidencia de 793,9 casos por cada 100.000 habitantes, mostrando un incremento con respecto a semanas previas, según el mencionado informe.
El aumento en la tasa de positividad de COVID-19 y, especialmente, de la gripe, que pasa del 13% al 20% en tan solo una semana, es respaldado por estos datos. La incidencia de gripe en Atención Primaria se manifiesta en todos los grupos de edad, observándose también un ligero incremento en la tasa de hospitalización, especialmente en personas mayores de 80 años. El coronavirus está experimentando un aumento entre los pacientes que acuden a los centros de salud, con tasas más altas en menores de 1 año, mientras que la hospitalización predomina en mayores de 80 años. Respecto al virus respiratorio sincitial, se observa un aumento en la tasa de infección, con cierta estabilización en menores de 5 años.
Desde el grupo de trabajo de vacunación de la Sociedad Española de Epidemiología (SEE) se destaca que la circulación de virus respiratorio sincitial, SARS-CoV-2 y gripe está traduciéndose en un mayor número de hospitalizaciones.
Con la cobertura de vacunación mostrando descensos, especialmente en personas mayores de 80 años, la situación se torna más crítica. Por su parte, la Asociación Española de Vacunología (AEV) señala que la población de 60 a 69 años no se percibe como vulnerable, lo que se refleja en las bajas tasas de vacunación en este grupo.
La campaña de vacunación, a pesar de estar por encima en gripe en comparación con COVID-19, aún se considera insuficiente. Según el ‘gripómetro’ impulsado por Sanofi, que mide la vacunación anual contra la gripe en la sociedad española, hasta mediados de diciembre solo el 60,5% de los mayores de 65 años se había vacunado.
Con la circulación de virus en aumento, los expertos advierten que la situación podría complicarse durante la Navidad, y la falta de cobertura de vacunación no permite prever una disminución significativa en la incidencia de los virus respiratorios. La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) alerta sobre la presión en la Atención Primaria y la saturación de urgencias hospitalarias en toda España debido a la incidencia de enfermedades respiratorias, COVID y gripe en esta temporada del año, exacerbadas por la escasez de personal.