Las Carmelitas Descalzas de Piedrahíta, una comunidad religiosa arraigada en la provincia de Ávila, ha abandonado su antiguo convento para embarcarse en una nueva etapa en Valencia. Su partida, que tuvo lugar en la madrugada de un jueves, ha dejado un vacío en esta pintoresca localidad abulense. El convento, con un cuadro de Alonso Cano y en espera de ser declarado Bien de Interés Cultural (BIC), se enfrenta a un futuro incierto.
La noticia de la partida de las diez hermanas carmelitas descalzas ha dejado a la comunidad local en estado de conmoción. La pérdida de las ceremonias religiosas en la capilla y la suspensión de la vida monástica en el monasterio han generado una gran preocupación entre los habitantes de Piedrahíta. Existe una creciente inquietud ante la posibilidad de que las obras de arte del convento, incluido el valioso cuadro de Alonso Cano, sean trasladadas a otro lugar.
La presidenta de la Asociación Alma Máter Arte y Cultura, Ester Bueno, presentó una solicitud en agosto de este año a la Junta de Castilla y León para que el monasterio sea declarado Bien de Interés Cultural (BIC). Su intención es asegurar una protección permanente del edificio y de sus valiosos bienes muebles, independientemente de futuros cambios de propiedad. «Es fundamental y justificado este estatus de BIC», subrayó Ester Bueno.
La comunidad está a la espera de la decisión de la Junta, que tiene de plazo hasta noviembre para pronunciarse. Para los habitantes de Piedrahíta, más allá de quién sea el futuro propietario, la preservación integral del edificio y de sus tesoros artísticos es de suma importancia.
El miércoles, la alcaldesa de la localidad, junto al párroco, la presidenta de la Asociación Alma Mater y una notaria, visitaron el monasterio para realizar un inventario de los bienes y documentar las reformas llevadas a cabo por las monjas en la última década.
La sociedad civil de Piedrahíta, consciente de la importancia de conservar su patrimonio cultural y la tradición monástica, está organizando movilizaciones a través de las redes sociales para solicitar la reanudación de las ceremonias religiosas en la capilla y la preservación de las valiosas obras de arte que son parte integral de su identidad cultural.
