Santa Teresa, Emilia Pardo Bazán o Gabriela Mistral, todas ellas mujeres de gran carácter, escribieron sus obras en español. El español es una lengua indoeuropea de la rama italocelta que es la evolución del latín vulgar con palabras agregadas principalmente del íbero, germano y árabe. El español, lengua que nació entre Álava, la Rioja y Cantabria cuya fonética es muy parecida al vasco tiene dos géneros el masculino y el femenino a diferencia de otras lenguas como el inglés, el chino o el japonés donde únicamente hay masculino.
La lengua es una herencia cultural que ha evolucionado a través de generaciones. Nuestro idioma hablado por quinientos millones de personas en el mundo está vivo y no necesita que también quieran cambiarlo de manera oficial desde esa política en la que nos dicen todo lo que tenemos que hacer, cómo, cuándo y dónde y se ofende si no hacemos lo que ellos dicen.
¡Pues, basta! Hay que enfrentar nuestras ideas de libertad a todos aquellos que nos quieren manejar la vida. El lenguaje español, es el que es y no puede cambiarse al antojo de la izquierda. El lenguaje inclusivo no existe, como así indican la Real Academia de la Lengua Española y el resto de las Academias nacionales de los países iberoamericanos. Poner que “les niñes son listes” es incorrecto y una verdadera gilipollez. El decir todo el rato “Los camioneros y las camioneras; los gatos y las gatas; los tontos y las tontas” es una patochada inútil.
El respeto a todos los humanos (mujeres, hombres, heterosexuales, transexuales, altos, bajitos, blancos, negros o amarillos) no está reñido con nuestro hermoso idioma y es innecesario. El decir que una persona es negra no es malo cuando se hace de manera educada ¿O es que cualquiera que sea blanco se ofende si se refieren a él como “blanco”?
De nuevo estamos ante otra patochada de la radicalidad ideológica cabreados por el fracaso del comunismo que se apropian de cualquier problema para enarbolar sus banderas que únicamente pretenden el enfrentamiento y nublar lo importante que no es otra cosa que la dignidad del ser humano, el respeto y la libertad; y si no que se lo pregunten a Mónica Oltra y su ex marido.